Mayo-Agosto
Revista Caravasar toma su nombre de aquellas construcciones ubicadas en las rutas comerciales del Medio Oriente y Asia Central, en donde las caravanas se reponían antes de continuar con su viaje.
Los caravasares, eran espacios de reunión e intercambio de bienes y cultura. Recogiendo ésto, Revista Caravasar busca ser un lugar de encuentro entre voces pasadas y presentes.
Para hacerlo, en cada número hemos querido tener un elemento común, que no es otro que una ciudad determinada.
Así, nuestro primer número está dedicado a Roma, la ciudad eterna; que en su mayor apogeo llegó a dominar gran parte de esas rutas comerciales y cuya influencia deja huellas imperecederas.
En lo caravasares imaginamos al viajero descansando de un viaje arduo. Días de frío o extremo calor. Soledad en el camino. El suspenso de poder ser asaltado por bandidos o atacados por algún animal salvaje. Y al llegar a refugio, la recompensa: una noche de descanso y comida.
Conversaciones a la luz de un brasero y el aroma de la comida en un caldero. Necesario refresco para el cuerpo y para el alma. Un encuentro.
Eso es lo que Revista Caravasar quiere ser.